Tres años con el Covid-19

Han pasado tres años. Tras varios días de indecisiones y medidas parciales, el 14 de Marzo de 2020 se declaró el estado de alarma en todo el territorio nacional por la pandemia de coronavirus. Ese mismo día se anunciaba por nuestro ayuntamiento el cierre de los locales públicos, museos, iglesia, bares y empieza el confinamiento para unas 80 personas que residían en el pueblo en dicha fecha.

Dos semanas después, el día 27 de marzo, por iniciativa de Dionisio Silvestre, concejal del ayuntamiento, se creó el grupo de Wasap “Valverde sin virus” que enseguida se convirtió en el nexo de unión de todos los valverdeños confinados. Una gran iniciativa. Sirvió para infinidad de cosas: noticias, necesidades puntuales, organización de la compra, recogida de medicación, etc. Y, sobre todo, ofrecía tranquilidad a los confinados, casi todos personas mayores.

Otras redes sociales como las páginas de Facebook o Instagram (del que están tomadas algunas de las fotos de este artículo), que nació el 5 de abril del mismo año con el empuje de los mozos de Valverde,  sirvieron de apoyo emocional a nuestra gente, volcando recuerdos, películas, fotografías, etc. haciendo más llevadero el aislamiento y aglutinando en la distancia a los que estando fuera del pueblo no podían acudir a ver a sus familiares o conocidos o a celebrar las diversas fiestas del pueblo.

Se cerraron los locales, se suspendieron las fiestas…Tuvimos dos años, 2020 y 2021, de fiestas en formato virtual: navidades, chinelas de San Ildefonso, Semanas Santas, mayo virtual, fiestas del Corpus y de la Octava… con gran aceptación de los que estaban dentro y de los que no podían viajar a su pueblo. Hasta las jóvenes mamás y sus hijos patrocinaron algún divertido y animoso video para levantar los decaídos ánimos de todos. https://www.facebook.com/100000531319347/videos/3380969038597440

Al principio permanecimos varios meses sin casos locales, aunque enseguida había saltado la noticia de los casos y fallecidos que estaban sucediendo en Cantalojas, pueblo hermanado de toda la vida, entre ellos el de su alcalde Narciso Arranz. Nada más conocerse se llevó a cabo un toque de campanas a las ocho de la tarde, gracias a la iniciativa de Raúl y Diego Mata, que luego se repetiría durante muchas jornadas a las 13 horas, con aplausos y saludos distantes en la plaza. A su vez su madre Mabel mantuvo su tienda abierta y un servicio de aporte de productos, suponiendo un gran recurso y una gran despreocupación para los valverdeños.

El cumplimiento de las normas de confinamiento fue absoluto por los vecinos, según comenta también el personal sanitario. A pesar de disponer del aire más sano  y de tocar a más campo que cualquier población de la península la gente de la sierra cumplió a rajatabla. Luego, en las sucesivas oleadas, sobre todo por casos importados  y de transmisión doméstica, se fueron produciendo brotes de agrupación principalmente familiar.

Aunque a los pocos meses, en Julio del 20, se inició una desescalada progresiva, la normalidad tardó un par de años en llegar: algunas reservas, pocas, en los establecimientos turísticos locales, que pasaron también su “annus horribilis”, “valverde sin bares” y petición de prudencia por el ayuntamiento (¡población vulnerable!). Afortunadamente hubo algún reconocimiento para los empresarios locales, como el Broche Gastronómico concedido a Sole y su Mesón Despeñalagua o una nota de agradecimiento a La Rueca en Instagram. También conseguimos realizar alguna actividad cultural (libro de Valverde, películas de Bernardo Gordo) en la iglesia con distancia y mascarillas, etc. Incluso la rondalla valverdeña ofreció su recital en la plaza, con distancia y también con mascarillas, ¡menos mal que no tenían que cantar!

El mes de Enero de 2021 vino marcado por las nevadas, la primera importante el uno de enero  y a los diez días la “Filomena”, que aisló, un poco más, a la población, valverdeña y nacional. Afortunadamente sin incidentes importantes. Y luego el verano del 21 y sobre todo del 22, vendría con una importante sequía, incluyendo un incendio. A pesar de todo, nuestro ayuntamiento consiguió sacar adelante en estos tres años de pandemia algunas iniciativas: reforma del edificio destinado a museo y centro de recepción de visitantes con bar, obras en las calles, cargadores para coches eléctricos, y, ya en el 2023, las cámaras de videovigilancia.

Afortunadamente, la pandemia no llegó a golpearnos con dureza: algunos brotes sin gravedad, no ingresos locales en UCI, excelente cobertura de vacunaciones, sin rechazo alguno ni efectos secundarios importantes, buena atención médica y de enfermería, y no tuvimos fallecimientos inesperados por motivo del virus, aunque en algún caso quizás colaboró. Pero sí hubo pérdidas destacadas. Nuestros paisanos Cano, Flora, Luis, Andrés, Antonia, Florita entre otros…, y entre los amigos externos Santiago Bernal y Luis Monge Ciruelo.

Ya en 2022 comenzamos a tener celebraciones normales, aunque costaba un poco desprenderse de la mascarilla y siguió habiendo algunos brotes, afortunadamente sin consecuencias importantes. En este año ya hubo Octava, fiesta de niños, apertura del museo…En octubre, la sierra despierta: Día de la Sierra en Cantalojas, Toma castañas en Zarzuela… El que suscribe se incorpora al grupo de cronistas oficiales de los pueblos de Guadalajara y nace el 23 de noviembre el blog valverdedeocejon.com.

Y por fin en enero de 2023 ya llegaron los reyes y ardió la chinela con alegría. El horizonte anuncia momentos venturosos, luce el sol y brilla el arcoíris tras la tempestad, así que…Felicidades, gracias y enhorabuena a todos.

¡Nunca más!

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