1897: 47 fallecidos en Valverde, 30 niños. ¿Qué pasó?

            En 1897 fallecieron en Valverde 47 personas, más del 10% de la población y la mayoría eran niños. ¿Qué sucedió? Repasamos los fallecimientos alrededor de 1900.

Cuando revisamos las inscripciones de las sepulturas de la ermita, que publicamos en la Carta del Pueblo hace cuarenta años nos sorprendió la cantidad de niños que había enterrados en el último cuarto del siglo XIX, y sobre todo entre 1895 y 1900. Revisando los libros del registro civil correspondientes a dichas fechas nos hemos encontrado con algunos datos impresionantes y curiosos.

A mediados de dicho siglo, en 1860 Valverde y Zarzuela tenías 531 habitantes según el INE, población que descendió hasta tener 414 en 1897. ¿Qué había sucedido? Nos consta que en dicha época hubo un repunte de la emigración, sobre todo a Sudamérica, pero creemos que hubo alguna causa más.

Entre 1875 y Abril de 1904 (30 años) se produjeron en Valverde 521 defunciones con la secuencia que se observa en el gráfico adjunto.

La primera curiosidad es el hecho de que de los 521 fallecidos 80 figuran como expósitos, niños adoptados, procedentes, sobre todo de la Real Inclusa de Madrid. Eran tiempos en que era habitual la adopción de bebés abandonados y que tener una familia numerosa se consideraba un hecho afortunado. El estado subvencionaba económicamente a la madre adoptiva (el niño figuraba expresamente bajo su custodia) y, en ocasiones, ese dinero del estado era el único ingreso económico que llegaba a la casa. Además, en su momento, sería una mano más para las tareas de la casa y el campo. Tampoco deben excluirse razones morales y altruistas.

Y del referido número de fallecidos, la proporción de niños, con frecuencia habiendo sobrevivido sólo unas horas o días, era absolutamente desproporcionada. Hasta 306 niños menores de 10 años se contabilizan en dicho periodo (¡el 60% de todos los fallecidos eran niños!), muchos más que ancianos fallecidos, como se puede comprobar en el gráfico. En ocasiones queda también constancia de la administración al nacer del agua de socorro, no llegando a ser bautizados.

Empieza la grada 6, sepultura 1 para párvulos: Regina Benito Mata, de Citara e Ignacio, a 4 de Octubre de 1897, en la esquina 2º abajo… Una niña que recibió agua de socorro, de Pepa y Clemente…

A veces los muy inmaduros eran llevados piadosamente por la madre a la ermita, incluso en una caja de zapatos. En estos casos, de niños muy pequeños, los entierros se realizaban en los nichos de atrás, debajo de la tribuna de la ermita y en cada uno se enterraban cuatro niños, uno en cada esquina, siendo sólo una cruz tallada en el mármol la que identifica la ubicación actual.

La media anual de fallecimientos estaba en 14,5 fallecidos/año, lo que se puede considerar normal para dicha época. Las causas habituales en los años normales eran las esperadas: gastroenteritis, avanzada edad, tuberculosis, cáncer…  Hubo también entre los niños viruela, bastante sífilis (sobre todo entre los incluseros), trabajo de dentición, no poder mamar, falta de vitalidad, miseria fisiológica … y algunas otras causas curiosas entre los adultos: herida causada por mano airada, herida penetrante en el pecho, hipocondría, astenia, tétanos a frígore, chispa eléctrica, …

Pero hay dos momentos en que se produce un incremento significativo: en al año 1889 con 28 fallecidos y, sobre todo, en el año 1897 con 47 fallecimientos. ¿Cuáles eran las causas registradas?  En los años previos se produjo en España una epidemia de difteria que obligó a adoptar medidas a nivel nacional. Parece ser que a Valverde llegó más tarde, probablemente debido a su aislamiento. Y, efectivamente, la mortalidad infantil en dicho año fue debida sobre todo a la difteria. Hasta 14 casos de niños fallecieron por esta causa en Valverde en dicho año de 1897.

Hubo un periodo especialmente funesto: en el comienzo de otoño de dicho año 1897 en 20 días murieron 18 niños, 4 el día 22 de septiembre y 3 el día 1 de octubre. ¿Cómo vivirían los valverdeños el hecho de enterrar un niño casi todos los días y algunos días varios? No podemos imaginar la sensación de catástrofe que esos días pudieron suponer para las madres y para todos nuestros paisanos. Aislados, sin médico, sin luz eléctrica, entierros en la ermita… Días atrás comentábamos también que a veces los enfermos no habían sido visitados por médico alguno y el fallecimiento se refrendaba sólo por el declarante o por testigos mediante escrito dirigido al juez.

…A las ocho de la mañana del día de hoy falleció en el domicilio del manifestante un niño, hijo del manifestante, de dos años, de enfermedad común, no habiendo tenido asistencia facultativa y sólo le ha visitado el practicante Dn. Juan Solano, cuyo dicho practicante se halla domiciliado en este de la fecha. Y teniendo en cuenta que será necesario el sepelio y la distancia a que se hallan los médicos, con el fin de que se provea lo necesario al efecto, presento a V. este parte…

En cambio, al siguiente año, 1898, sólo hubo 7 fallecimientos y la secuencia de fallecimientos en el periodo siguiente se puede considerar normal. Excepcionalmente en 1925 no se llegó a registrar ningún fallecimiento y sólo 2 en 1928. También están vacíos los registros correspondientes al periodo de la guerra civil. En los siguientes años los fallecimientos en la localidad son muy escasos, figurando como último registro en los libros el de Cándido Monasterio el 8 de septiembre de 1991 con 101 años.

Y esta es la imagen de la ermita en aquellos años. Penas y recuerdos.

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